domingo, 21 de octubre de 2012

Decos FTA reprogramados atentan contra negocio de la TV por Suscripción



JORGE ESPINOZA/@JorgeTelecom
Entre el primer semestre de 2011 y la primera mitad del presente año, los servicios de Difusión por Suscripción experimentaron 336.422 nuevas adhesiones en Venezuela, al pasar de 2,61 millones a 2,95 millones de acuerdo con las cifras oficiales colectadas y divulgadas por Conatel. Durante el lapso, que significó una recuperación parcial del ritmo, Cantv lanzó su oferta DTH (Direct-To-Home) uniéndose a un sub-segmento donde sólo participaban DirecTV y Movistar. A finales de junio pasado, Inter dio a conocer su incursión luego de pactar con el proveedor chileno TuVes y la operadora móvil Digitel.
El Censo Nacional 2011 reveló que el año cerró con 6,95 millones de viviendas ocupadas, por lo que contrastando las cifras, aparentemente había un mercado potencial de cuatro millones de hogares que bien pudieran servirse con DTH. Un estudio de mercado de DirecTV Venezuela al cual tuvo acceso Inside Telecom, revalidaba el total de abonados hasta junio de 2011 (2,57 millones) y dejaba entrever una marcada alza del acceso satelital por sobre el cableado, como es tendencia en América Latina.
El documento revelaba además la existencia de 1,73 millones de conexiones ilegales, los llamados «colgados», que elevaban la penetración total de los servicios por cable o satélite a 4,3 millones, quedando sólo 1,53 millones dependiendo de señales abiertas y otros 668.000 sin ningún tipo de disponibilidad televisiva por carecer de receptores. Según el Instituto Nacional de Estadística este último indicador se redujo a 450.000.
Ya superado el tercer trimestre de 2012, variarán nuevamente los resultados de Conatel sobre el sub-sector que se distingue por no registrar grandes saltos entre julio y septiembre. Es posible que se haya alcanzado el hito de los tres millones de clientes de TV paga, pero con todo y que DirecTV lleva la batuta, Movistar finiquita el lanzamiento de la mayor oferta de canales HD, Cantv se encamina a extender la oferta de canales con un segundo transpondedor del Satélite Simón Bolívar e Inter se dedica a configurar su red de instaladores de DTH en el territorio nacional, hay un «producto» que poco a poco gana adeptos.
Se trata de kits comercializados entre rangos de 2.000 a 3.000 bolívares más la instalación, que a través de decodificadores FTA (Free-To-Air) modificados, otorgan la posibilidad de ver entre 180 y 240 canales -en su mayoría de suscripción- pero sin cancelar alguna mensualidad y por ende afectan el mercado de los operadores legalmente establecidos, de forma tan desleal como las pequeñas cableoperadoras que pululan en el interior del país desde hace más de una década.
Sin garantía plena de funcionamiento o acceso a la programación prometida, los vendedores-instaladores del popularmente llamado «DirecTV gratis» cazan clientes a lo largo de la geografía nacional, con la promesa de una inversión única. Es tal la desinformación, que hay quienes están confundiendo esa gratuidad con la de los canales que no codifican su señal y son captadas bajo los preceptos de FTA. Otros sí tienen plena conciencia de lo que compran, embelesados con el anzuelo que resultan los canales HD.
EMULACIÓN
En Chile, DirecTV ya reaccionó ante el explosivo aumento de los decodificadores asiáticos piratas y sus efectos contractivos del mercado legal. La empresa austral, en voz de José Ignacio Alvear, recomendó a la nación tomar medidas urgentes para combatir el flagelo que afecta a los consumidores, proveedores de servicio, distribuidores de señales y al mismo Estado. El representante considera que el explosivo aumento de dichos sistemas de acceso ilegal a la TV de pago satelital, amenazan con que ésta desaparezca si no unen fuerzas todos los actores involucrados.
El decrecimiento se manifiesta en que la industria de la TV paga chilena apenas sumó 39.400 suscriptores en el primer semestre de este año, frente a 110.310 registrados en el lapso similar de 2011, lo cual representa una caída de 64% en un año, sin que exista alguna razón aparente distinta al referido acto pirata. Alvear apunta que Chile tiene un entorno macroeconómico con alta tasa de empleo pleno y una inflación controlada.
El representante de DirecTV, que no es la única afectada en ese mercado –también Movistar y ClaroTV-, advierte la comercialización y consumo de cientos de decodificadores FTA al día, «que contienen chips que emulan ilegalmente las tarjetas de acceso condicional que deben insertarse en los decodificadores de los operadores de TV paga, permitiendo captar ilegalmente la señal de éstos y así acceder, también de forma ilegal, a la programación de proveedores de contenidos», tal como lo publica el portal canal-cl.com.
Asimismo, la necesidad de antenas para captación de las señales habría disparado el robo de éstas en las comunidades.
ALTERNATIVAS
José Ignacio Alvear explicó que «estos decodificadores piratas entran por aduanas, muchas veces como contrabando, etiquetados como consolas de videojuegos, DVD, o como si fueran de la clase de FTA legales, es decir, como decodificadores que no poseen el chip que ha violado los derechos de propiedad intelectual del dueño del software de las tarjetas de acceso condicional».
Más allá de la intervención del regulador Subtel y otros entes responsables de resguardar la propiedad intelectual, se plantea solucionar el problema a través de la implementación de una normativa amparada por el Tratado de Libre Comercio (TLC) firmado entre Chile y EEUU en 2003, según la cual se tipifica como «una infracción civil o penal la construcción, ensamblaje, modificación, importación, exportación, arrendamiento o distribución de otro modo de un dispositivo o sistema tangible o intangible, (…) que ayude a decodificar una señal de satélite portadora de un programa codificado sin la autorización del distribuidor legal de dicha señal» y «(b) una infracción civil o penal la recepción o distribución maliciosa de una señal satelital…»
En Venezuela, antes de que el fenómeno siga extendiéndose y tome dimensiones considerables, sería pertinente que el Estado y los proveedores de DTH establezcan mecanismos para detener el crecimiento del ilícito negocio. De no hacerse, aparte del daño directo al subsector de Difusión por Suscripción, se corre el riesgo de que el público meta de la Televisión Digital Terrestre que el Gobierno finalmente planea encender en Venezuela antes de finalizar el año, decrezca del millón y medio de hogares y sus habitantes se inclinen por el «DirecTV gratis», en lugar de sintonizar los canales nacionales y regionales que transmitan en digital.
Y así como Conatel habilitó el número 26628 (CONAT) para recibir denuncias vía SMS en contra de los operadores de Difusión por Suscripción, debiese instar a dejar al descubierto a quienes están detrás de la comercialización de decodificadores FTA modificados.

Fuente: InsideTele.com